"First in Human" ("Primera vez en humanos"), una serie documental en tres episodios del Canal Discovery, tiene como protagonistas a cuatro pacientes del Centro Clínico de los Institutos Nacionales de la Salud, también conocido como la "Casa de la Esperanza".
"Me sentí muy contento de saber que estaba contribuyendo a que este trabajo verdaderamente transformador continúe".
El actor Jim Parsons, ganador de los premios Emmy y Golden Globe tiene millones de admiradores en todo el mundo. Es protagonista de la exitosa serie de televisión "The Big Bang Theory" y de películas memorables como "Hidden Figures" ("Talentos ocultos"). Parsons recientemente produjo y narró la serie documental "First in Human" ("Primera vez en humanos") del canal Discovery que sigue a cuatro pacientes en el Centro Clínico de los NIH. Habló con la revista MedlinePlus de sus experiencias de visitar los Institutos Nacionales de la Salud y aprender directamente de los investigadores y los pacientes.
¿Sabías del Centro Clínico de los Institutos Nacionales de la Salud y de su trabajo antes de empezar a filmar "First in Human" ("Primera vez en humanos")?
No tenía ni idea. Ni siquiera sabía qué significaban las siglas "NIH".
¿Qué aprendiste al trabajar con los médicos, las enfermeras y los pacientes que atendían?
Ay, Dios mío. Todos los que trabajan en estos estudios clínicos de los Institutos Nacionales de la Salud tienen la capacidad de combinar la devoción a su trabajo con la pasión y el cuidado de cada paciente de una manera muy profunda. Supongo que es lo que todos esperan de un profesional de la salud, pero uno no siempre encuentra alguien así, un trabajador incansable y superinteligente que además es cálido y compasivo.
Lo que me pareció interesante de los pacientes fue que cada uno era su propio y único individuo, y al mismo tiempo, todos tenían un aura de esperanza que era sorprendentemente similar.
Eran muy diferentes entre sí, por la edad, el origen étnico y la enfermedad y sin embargo, todos tenían una cualidad brillante, la esperanza.
¿Qué le diría a alguien que está considerando participar en un estudio clínico?
Evidentemente, es una decisión muy personal de cada uno y su familia. Sin embargo, hablé con un paciente que me contó cómo su propio médico había desalentado activamente su participación en los estudios clínicos que ofrecían los NIH.
El razonamiento del médico era que se estaba dejando usar como conejillo de Indias para que estos investigadores experimentaran con ella. Entiendo la preocupación porque como su nombre indica, los estudios clínicos son experimentos y, por lo tanto, son proceso con riesgos y sin garantías de éxito.
Sin embargo, en respuesta a esto, quisiera reiterar lo que dije antes sobre los médicos y enfermeros que trabajan en el centro de investigación de los Institutos Nacionales de la Salud. En todo momento actuaron con comprensión y empatía y si consideraban que un tratamiento o curso de acción era demasiado arriesgado, no lo hacían.
Ojalá más médicos pudieran saber más sobre cómo son realmente. Probablemente sea difícil para muchos, pero una visita al Centro Clínico de los Institutos Nacionales de la Salud sería muy reveladora en este sentido. A mí me abrió los ojos.
¿Qué mensaje tiene para los estadounidenses sobre la inversión que se hace en investigaciones médicas por medio de los Institutos Nacionales de la Salud?
Como contribuyentes cuyo dinero ayuda a financiar el trabajo de los Institutos Nacionales de la Salud y los estudios que allí se realizan, deberíamos estar muy orgullosos. Así me sentí yo cuando visité los Institutos Nacionales de la Salud y al ver el documental que habíamos hecho. Me sentí muy contento de saber que estaba contribuyendo a que este trabajo verdaderamente transformador continúe, y también un poco bobo por no haberme enterado de esto antes.