Un equipo de científicos, apoyado en parte por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés), descubrió cambios similares entre las muestras de la nariz y del pulmón de pacientes con cáncer pulmonar.
Los estudios han demostrado que la actividad de ciertos genes de las células de los pulmones de personas que fuman o han fumado permite distinguir el cáncer de pulmón de los tumores benignos (no cancerosos). Pero la recolección de muestras de células de los pulmones es un procedimiento invasivo.
Estos descubrimientos sugieren que fumar puede causar cambios genéticos similares en las vías respiratorias y que puede haber una forma no invasiva de detectar el cáncer de pulmón mediante la toma de muestras de células de la nariz con un hisopo, en vez de tomarlas de los pulmones.