La Dra. Marie A. Bernard, que antes trabajaba en el Instituto Nacional Sobre el Envejecimiento, asumió la función de directora de diversidad del personal científico (en inglés) en los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés) a principios de este año. Antes era directora interina y, aunque acaba de empezar en su puesto permanente, no ha demorado en poner manos a la obra.
La Dra. Bernard copreside por separado la Iniciativa UNITE en los NIH (en inglés), cuya meta es promover la diversidad en todos los Institutos de los NIH y en la comunidad científica en general.
En esta entrevista, habla de las prioridades de su oficina en los próximos meses, y de lo que hace para mantener la buena salud cuando no trabaja.
¿Qué significa la diversidad en su función y en los NIH?
Cuando nos referimos a diversidad, pensamos en términos generales. La definición de diversidad de los NIH abarca a las mujeres, las personas subrepresentadas en las ciencias por raza o etnia, las personas con discapacidades, y a otros grupos que no tienen la misma representación en la mesa. La meta de mi oficina es facilitar la diversidad del personal científico dentro y fuera de los NIH. Sabemos que los grupos diversos conducen a una mayor creatividad e innovación. Por eso, queremos beneficiarnos de la mayor variedad posible de perspectivas.
¿Cuáles son algunas de las prioridades de su equipo para el año próximo?
Una de las primeras medidas que hemos tomado es ofrecerles a los institutos y centros de los NIH la oportunidad de aumentar el pago de suplementos por diversidad. También estamos muy interesados en crear programas que incentiven a las instituciones externas [universidades u hospitales que realizan investigación con el apoyo de los NIH] a reflexionar sobre cómo es su cultura y qué tipo de cosas podrían fomentar la inclusión y la excelencia. Internamente, hemos estado revisando nuestras normas y procedimientos, y hay una norma que le explicará con claridad al personal de los NIH cómo denunciar incidencias de discriminación racial, algo que nos parece realmente importante. Lo anunciaremos este otoño.
¿Puede hacer un resumen breve de UNITE?
UNITE es un programa ambicioso, dirigido por el director de los NIH, el Dr. Francis S. Collins, destinado a acabar con el racismo estructural. Es el fruto de intensos debates que comenzamos a celebrar en junio de 2020. Decidimos que estamos en un punto de inflexión y que no podemos dejar pasar este momento. Por ejemplo, asegurar que no haya obstáculos por motivos de raza o etnia dentro ni fuera del personal de los NIH. Tengo el privilegio de copresidir esa iniciativa.
¿Cuál es su consejo para otras mujeres, específicamente para las mujeres de color que aspiran a puestos de liderazgo científico?
Sólo tienen que saber que pueden lograrlo. Ténganse confianza, es casi como ser actor o actriz. Hay mucho que no sale como uno quisiera, pero deben tenerse fe. Uno puede tenerlo todo, pero no necesariamente todo a la vez. Aprovechen y obtengan ayuda para las distintas funciones que cumplen en sus vidas. Y en ese sentido, tengan una red sólida, tanto personal como profesional.
¿Qué es lo que la gente no sabe de usted?
Lo que muchos no saben de mí es que me falta poco para ser cinturón negro de taekwondo. Solía guardar las tablas rotas en mi oficina para mostrarlas, como diciéndole a la gente: ¡no te metas conmigo! Pero en serio, he descubierto que con la actividad física, que últimamente para mí ha sido más el yoga e ir al gimnasio, lo importante es tener ese tiempo personal para mantenerse centrado.