Conducir de manera segura es importante, tanto a los 17 como a los 87 años. Sin embargo, con la edad, conducir un automóvil puede ser más difícil, lo que pone en riesgo a los adultos mayores y a los demás conductores.
¿Por qué es más difícil conducir a medida que envejecemos?
Nuestros músculos se debilitan y los reflejos disminuyen. Por ello, es más difícil reaccionar con rapidez y frenar de forma segura. Los problemas de la vista relacionados con la edad, como cataratas o la pérdida gradual de la visión, dificultan ver las señales de tránsito y reconocer lugares conocidos. Además, la pérdida auditiva hace que sea más difícil oír a otros conductores o a los vehículos de emergencia.
Pero las personas mayores pueden tomar medidas importantes para estar seguras en las carreteras y caminos:
- Trate de conducir de día y cuando haga buen tiempo.
- Si no le queda más remedio que conducir de noche, vaya por caminos bien iluminados.
- Deje más espacio entre usted y el automóvil de adelante.
- Planee su ruta de antemano.
- Abróchese siempre el cinturón de seguridad.
- Nunca conduzca si no se siente bien o está estresado o cansado.