El Dr. Russell E. Ware había investigado la enfermedad de células falciformes en Estados Unidos durante unos 10 años cuando decidió viajar al Oriente Medio para comprender mejor el impacto de la enfermedad en el mundo.
El Dr. Ware es el codirector ejecutivo del Instituto de Cáncer y Enfermedades de la Sangre de Cincinnati Children's Hospital. Su investigación cuenta con el apoyo de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH).
Al llegar a Oriente Medio, al Dr. Ware le sorprendió comprobar que la enfermedad de células falciformes se había convertido en una afección a nivel mundial. No se limitaba a personas de ascendencia africana o hispana, como en EE. UU.
Mediante su investigación, el Dr. Ware se enteró de que mucha gente tiene la enfermedad en el Caribe, la India y Asia.
"La mayoría de la gente no sabe que en Estados Unidos a todos los recién nacidos se les hacen pruebas de enfermedad de células falciformes".
- Dr. Russell E. Ware
Ayudar a los que menos tienen
El Dr. Ware decidió buscar una manera de tratar a las personas con enfermedad de células falciformes en países con pocos recursos o ninguno.
"Hemos establecido lazos de colaboración en estos países para ayudar a las personas sin recursos", explica. "Las diagnosticamos, las ponemos al día con sus vacunas y les damos hidroxiurea. Es un trabajo en curso".
La investigación muestra que las personas con la enfermedad de células falciformes son más susceptibles a la malaria. Pero cuando reciben hidroxiurea, una pastilla que alivia el dolor y puede prolongar la vida de los pacientes, el riesgo de malaria disminuyó más de la mitad.
En los pacientes con enfermedad de células falciformes, la hidroxiurea también previene los accidentes cerebrovasculares y los problemas cerebrales, ya que permite que los glóbulos sanguíneos mantengan su forma redonda y puedan transportar libremente el oxígeno por el torrente sanguíneo. Una mejor circulación significa menos dolor.
"En África, entre el 60 % y el 90 % de los niños con enfermedad de células falciformes mueren antes de cumplir los cinco años", dice el Dr. Ware. "La mayoría fallece sin saber que tenía la enfermedad. Una intervención simple, como darles hidroxiurea, puede tener un gran impacto en la mortalidad (o incidencia de muerte) en los lugares donde es muy alta".
El uso de hidroxiurea en Jamaica y África
Gracias al apoyo de los NIH, el Dr. Ware y su equipo de investigación pueden tratar a niños de Jamaica y África sin costo alguno para sus familias.
"Para nosotros también ha sido una sorpresa muy grata", añade el Dr. Ware. "Los niños toman el medicamento con regularidad".
Al Dr. Ware le gustaría que la hidroxiurea, que se ha usado durante 20 años con pocos o ningún efecto secundario, fuera más barata y estuviera más disponible para todos a nivel mundial.
Dice que quiere que todos los niños reciban más rápido el diagnóstico de enfermedad de células falciformes y un tratamiento más eficaz, especialmente en las regiones de pocos recursos o ninguno.
"En los últimos años, ha cambiado mucho la investigación sobre la enfermedad de células falciformes ", agrega. "La mayoría de la gente no sabe que en Estados Unidos a todos los recién nacidos se les hacen pruebas de enfermedad de células falciformes".
Recomienda que las personas afectadas vean a un especialista en la enfermedad y a su médico de familia. "Los pacientes con enfermedad de células falciformes tienen que ver a especialistas que los puedan inscribir en estudios clínicos", dice. "Es una enfermedad grave".