Si usted tiene la menstruación (el período menstrual), la menopausia ocurre cuando su ciclo menstrual termina por 12 meses consecutivos. Además del sistema reproductivo, la menopausia también afecta la salud del corazón y de los huesos, la función del cerebro, el patrón del sueño, la producción de hormonas y más.
Descubrimiento en un estudio pionero de 30 años
La Iniciativa de Salud de la Mujer (WHI, por sus siglas en inglés) es un estudio a largo plazo lanzado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre en 1991, en el cual se inscribieron más de 161.000 mujeres en todo el país. La meta era prevenir la enfermedad del corazón, ciertos tipos de cáncer, la osteoporosis y otras enfermedades comunes en mujeres posmenopáusicas.
La Dra. Sarah Temkin, M.D., Directora Asociada de Investigación Clínica en la Oficina de Investigación sobre la Salud de la Mujer (ORWH por sus siglas en inglés) de los NIH, afirmó que dicha Iniciativa era un proyecto “pionero”.
“Hasta hace solo algunos años antes del lanzamiento de la WHI, las mujeres de edad reproductiva habían sido excluidas de la investigación clínica”, afirmó la Dra. Temkin. “De modo que esta idea de realizar un proyecto de investigación masivo centrado en una necesidad de salud de las mujeres era realmente revolucionaria en esa época”.
En los ensayos clínicos realizados dentro del marco de la WHI se hicieron pruebas para determinar si la hormonoterapia durante la menopausia—la administración de medicamentos para reemplazar las hormonas que pierde una persona durante la menopausia, incluso el estrógeno y la progestina—podía reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular en época más avanzada de la vida. Los investigadores estudiaron la administración de una combinación de estrógeno y progestina y de estrógeno solo. Para estos ensayos, emplearon las dosis de hormonas más comúnmente recetadas en esa época.
En el año 2002, se descubrió en el estudio que las mujeres posmenopáusicas que recibían la combinación de hormonas corrían un mayor riesgo de tener cáncer del seno y enfermedad del corazón. La noticia causó una enorme reducción del empleo de la hormonoterapia para aliviar los síntomas de la menopausia.
Sin embargo, los datos más recientes muestran que la hormonoterapia puede ser inocua para algunas mujeres—particularmente las más jóvenes y sanas—para aliviar los síntomas del comienzo de la menopausia. Estos datos también muestran que la hormonoterapia solamente con estrógeno puede llegar a reducir los riesgos de cáncer del seno.
Por eso es importante hablar con el médico sobre los mejores tratamientos para aliviar los síntomas de la menopausia que sufre usted. Si necesita ayuda para encontrar atención más especializada, la Sociedad Norteamericana de la Menopausia tiene una lista de médicos certificados en el tratamiento de la menopausia en todos los Estados Unidos.
El estudio de la WHI terminó en el año 2005, pero hasta hoy se recopilan datos. Eso ha dado origen a otras investigaciones sobre la salud y el envejecimiento de la mujer.
Más investigaciones sobre los síntomas de la menopausia
En 1994, los NIH lanzaron el Estudio de la salud de la mujer en todo el país (SWAN, por sus siglas en inglés). La meta era entender los cambios físicos, biológicos, fisiológicos y sociales que ocurren a medida que las mujeres envejecen. Las 3.300 participantes en el estudio se caracterizaron por su diversidad racial y étnica y eran más jóvenes que las participantes en la WHI.
Luego en 2008, en los ensayos relacionados con las Estrategias para el estudio de la menopausia: Búsqueda de respuestas definitivas sobre los síntomas y la salud (MsFLASH, por sus siglas en inglés) se descubrió que algunos antidepresivos podían reducir las olas de calor (un síntoma común de la menopausia) y que el ejercicio moderado podía ayudar a controlar el insomnio relacionado con la menopausia.
Desde 2016, en el ensayo MsBRAIN se han estudiado los efectos de la menopausia en la salud cerebral a corto y largo plazos. Los investigadores también quieren saber si estos efectos pueden ayudarles a los médicos a detectar la enfermedad de Alzheimer porque las mujeres corren un mayor riesgo de tenerla que los hombres.
¿Cómo afecta la menopausia las disparidades y los determinantes sociales de la salud?
Los síntomas de la menopausia varían en las poblaciones de diferente raza, origen étnico y antecedentes socioeconómicos. Por ejemplo, en el estudio SWAN se observó que las olas de calor son más intensas y más frecuentes en las mujeres de algunas razas. Se observaron grandes diferencias en la salud cardiovascular de diferentes grupos raciales y étnicos. En comparación con las mujeres blancas, es más probable que las mujeres negras se sometan a histerectomía (una operación para extirparles el útero), que a veces incluye ooforectomía (una operación para extirparles los ovarios). Las ooforectomías pueden hacer que los síntomas de la menopausia aparezcan más pronto.
Otros factores que afectan la experiencia de las mujeres con la menopausia incluyen el acceso a atención médica y a seguro de salud. La nutrición y la obesidad también pueden desempeñar una función en los síntomas de la menopausia, al igual que las variaciones culturales como el estigma social o la celebración de la menopausia, agregó la Dra. Temkin.
No está claro si los factores ambientales pueden influir en la menopausia y el riesgo relacionado del envejecimiento y la enfermedad. Eso es algo que los NIH esperan descubrir con más investigaciones. Ustedes pueden ser parte de esos futuros descubrimientos al ingresar a un ensayo clínico en los NIH.
Lo que queda claro—afirmó la Dra. Temkin—es que los tratamientos para la menopausia deben atender las necesidades de cuidado de salud y ser acordes con las preferencias y las metas de cada persona.
“Cuando se trata de pasar por el período de transición hacia la menopausia, no todos los recorridos son iguales. Hay un momento preciso y un lugar apropiado para que cada paciente encuentre la forma de manejar sus síntomas”, afirmó la Dra. Temkin.