La lactancia materna ofrece muchos beneficios de salud para las mujeres y sus bebés. Y ahora se suma otro potencial.
Un estudio reciente encontró que las mujeres que amamantan pueden tener un menor riesgo de menopausia precoz. La menopausia precoz (antes de los 45 años) puede llevar a una pérdida más rápida de masa ósea, deterioro cognitivo y enfermedades cardíacas.
El estudio, financiado por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés), estableció que el riesgo de menopausia precoz en mujeres que amamantaron exclusivamente durante 7 a 12 meses era un 28 % menor que las que amamantaron durante menos de 1 mes. El riesgo de las mujeres que amamantaron durante 25 meses o más era un 26 % menor.
Los resultados del estudio también sugieren que el embarazo en sí podría reducir el riesgo de menopausia temprana. En comparación con las mujeres que nunca han estado embarazadas o que han estado embarazadas por menos de 6 meses, el riesgo de menopausia precoz de quienes tuvieron un embarazo a término es un 8 % menor. El riesgo de las que tuvieron dos embarazos era un 16 % menor, y el de las que tuvieron tres embarazos era un 22 % menor.
Los investigadores teorizan que los eventos reproductivos que retrasan o detienen la ovulación, como el embarazo y la lactancia materna, tal vez estén relacionados con el retraso de la menopausia.