La Dra. Helene M. Langevin, M.D., estaba destinada a seguir la carrera de medicina. No solamente creció rodeada de médicos, sino que siempre demostró curiosidad por saber cómo funcionaba el cuerpo. En 2018, se convirtió en Directora del Centro Nacional de Salud Complementaria e Integral (NCCIH). En este Centro se examina la forma en que los tratamientos tradicionales y no convencionales, administrados en conjunto, pueden mejorar la salud de toda la persona. Estos tratamientos pueden ser prácticas como meditación o yoga.
La Dra. Langevin habló con la revista MedlinePlus Magazine de los NIH sobre su carrera y lo que sabemos con respecto a la medicina complementaria e integral.
¿Puede hablar de sus antecedentes y de lo que la llevó a estudiar medicina?
Vengo de una familia de médicos. En mi familia hay tantos médicos, que no se pueden contar. Yo ejercí la medicina interna y fui endocrinóloga. Este último campo, el médico se especializa en el sistema corporal que controla las hormonas. Antes de eso, en la escuela secundaria a comienzos de los años setenta del siglo XX, tuve un maestro que nos enseñó técnicas básicas de respiración y relajación como ayuda para calmarnos antes de los exámenes. Adopté esa práctica. Me interesé por el tai chi y luego aprendí y practiqué acupuntura. De ahí provino mi interés por la medicina complementaria.
Usted ha hecho mucha investigación sobre acupuntura. ¿Qué aspecto le interesó?
Fue la curiosidad sobre una experiencia que pude observar directamente. Cuando a uno le enseñan a poner una aguja en acupuntura, no solamente la inserta. La manipula, la hace girar, la tira hacia arriba y la empuja hacia abajo y uno siente algo. El paciente siente algo, pero el acupunturista también siente que está sujetando la aguja. Yo no entendía qué era eso.
Se producía este fenómeno que uno podía ver, observar y sentir, pero que no podía explicar. Tenía curiosidad de saber si esto podía medirse. Recibí fondos para crear un dispositivo robótico para insertar, manipular y sacar la aguja. Tuvo éxito. Terminé estudiando acupuntura por 25 años. Pero lo que estaba estudiando era un efecto biomecánico básico. Era el acoplamiento de la aguja con el tejido conjuntivo.
Hoy en día, eso es lo que todavía hago en mi laboratorio en los NIH. Estudio cómo el estiramiento del tejido conjuntivo afecta las células.
¿Por qué quería llegar a ser Directora del NCCIH?
Me interesaba ampliar el concepto de medicina integral—específicamente estudiar y tratar a toda la persona, no solamente un órgano o un sistema a la vez. Después de más de 20 años de investigaciones en la Universidad de Vermont, llegué a ser Directora del Centro Osher de Medicina Integral. Ese Centro tiene una sede conjunta en la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard y en el Hospital Brigham y de la Mujer de Boston. También tenía un laboratorio en el hospital. Mi trabajo en Harvard consistía en unir todos los programas de salud y medicina integral en uno solo.
Una vez que me convertí en Directora del NCCIH, esta idea de la salud de toda la persona se convirtió en el tema central de nuestro nuevo plan estratégico. De modo que estos son temas que ya había comenzado a desarrollar antes de entrar el NCCIH.
¿Qué significa “salud complementaria e integral”?
“Complementaria” se refiere a las terapias o prácticas que se originaron fuera de la medicina convencional. Estas se integran gradualmente a la atención de salud convencional a partir de la evidencia científica. Estas terapias solían llamarse “alternativas”, pero ya no. No creemos que la expresión “medicina alternativa” es una buena idea porque estas terapias no deben emplearse en lugar de la atención convencional. “Complementaria” es un mejor término porque estos enfoques pueden emplearse junto con la medicina convencional. Con frecuencia cada vez mayor, el límite entre los tratamientos convencionales y complementarios es cada vez más indefinido. Por ejemplo, uno va a un fisioterapeuta, que puede realizar técnicas manuales similares a las que seguiría un terapeuta masajista. Muchas veces, estos profesionales reciben formación en medicina convencional y complementaria.
En los NCCIH, nos enfocamos en el concepto de “integración”. La atención de salud integral significa juntar los enfoques que típicamente no son farmacológicos (es decir, en los que no se emplean medicamentos) para cuidar a toda la persona. Muchas veces, estos enfoques se usan juntos para abordar los elementos nutricionales, psicológicos y físicos de la salud.
¿Cómo determina el NCCIH si la medicina complementaria es inocua o eficaz? ¿Se usan los mismos métodos empleados para evaluar la medicina convencional?
Es el mismo principio. En toda la investigación que financiamos se debe someter a prueba una hipótesis científica bien definida. Eso exige un diseño de investigación y controles, medidas de inocuidad y análisis estadísticos que sean apropiados y así sucesivamente. Por lo común, cuando uno estudia un tratamiento o un medicamento, se estudian los efectos de una molécula en un objetivo. Si se estudia a la gente, se compara el tratamiento con un placebo (algo que simula el tratamiento pero que no tiene ningún ingrediente activo).
Cuando se estudia un tratamiento no farmacológico, especialmente cuando se combinan varios tratamientos a la vez, eso se hace más complejo. En el NCCIH tuvimos un taller sobre la forma de hacer eso empleando métodos científicos de vanguardia. Estamos comenzando a entender la forma de estudiar sistemas complejos y de medir el cambio de un sistema con el transcurso del tiempo. Estamos muy emocionados de emplear esta clase de métodos para estudiar la salud de toda la persona.
¿Cómo se puede averiguar si un proveedor de atención de salud complementaria tiene buena reputación o goza de idoneidad en su campo?
Averigüen dónde se formaron. Por ejemplo, pregúntenles a los acupunturistas o quiroprácticos dónde se formaron, si tienen un diploma de una organización acreditada y si tienen licencia. Muchas de las escuelas que enseñan terapias integrales ayudan a mantener las normas de la profesión. Y muchas de ellas están afiliadas a organizaciones de investigación.
También le pueden pedir a su proveedor de atención de salud que los remita a profesionales de atención de salud complementaria afilados a un hospital o a una clínica o que ellos recomienden. Asegúrense de que su proveedor regular de atención de salud sepa cuál es la clase de atención integral que ustedes reciben. Tenemos recursos en el sitio web del NCCIH que pueden ayudar.
Los suplementos alimentarios como vitaminas, minerales, hierbas y otros productos botánicos son una parte gris de la medicina y la nutrición. ¿A dónde le indicaría a la gente que fuera para obtener más información al respecto?
El NCCIH apoya la idea de que la mayoría de la gente puede obtener los nutrientes necesarios de los alimentos que consume. Por lo general, no es necesario tomar suplementos alimentarios si uno consume una alimentación sana y equilibrada y no tiene una afección subyacente que exija tomar suplementos de vitaminas o minerales. También hay productos botánicos (plantas) que la gente toma con la esperanza de mejorar la función del sistema inmunitario o de ayudar al sueño o a la relajación. Eso es lo que llamamos uso medicinal de las plantas o de otros productos naturales. Por el momento, no tenemos evidencia sólida de que los productos botánicos pueden emplearse de esa forma, pero se necesitan más investigaciones en ese campo. El sitio web del NCCIH tiene muchísima información sobre estos productos y sobre la investigación que hemos realizado hasta la fecha.
El NCCIH también tiene una serie educativa en línea llamada “Know the Science” (Conozca la ciencia). ¿Qué cubre?
Esta es una parte muy importante de nuestra misión en el NCCIH: educar al público y ayudar a la gente a entender la forma de interpretar toda la información disponible, ya sea en la web, la televisión o en cualquier otra parte. La gente es bombardeada con mucha información conflictiva o errónea sobre diferentes terapias. Nuestro sitio web proporciona mucha información sobre la forma de ayudar a la gente a ser mejores consumidores de atención de salud complementaria. La serie “Know the Science” tiene muchos módulos diferentes en los que se abordan temas como los siguientes:
- Cómo entender un artículo en una revista científica.
- Cómo determinar si un relato de una noticia es preciso o si omite información importante.
- Afirmaciones de verificación de los hechos sobre la inocuidad de los productos naturales. El consumidor experto debe saber que se hacen muchas afirmaciones falsas sobre los productos naturales.
¿Puede dar ejemplos de las personas que pueden beneficiarse de la atención de salud complementaria e integral?
Muchas personas con dolor crónico buscan terapias complementarias. Algunas poblaciones, como los veteranos, sufren desproporcionadamente de dolor crónico. Prestamos mucha atención a las circunstancias especiales del manejo del dolor en los sistemas de atención de salud de los militares y los veteranos.
Muchas terapias complementarias e integrales se incluyen en las guías clínicas para el manejo del dolor. Sin embargo, no suelen usarse por causa de barreras como la falta de cobertura de seguro. La iniciativa de ayuda para terminar con la adicción a largo plazo (Helping to End Addiction Long-term® Initiative) incluye investigaciones sobre la integración de estas terapias a los sistemas de atención de salud. Las personas que luchan con el uso indebido de opioides para alivio del dolor podrían beneficiarse especialmente de esto.
Las personas que tienen problemas del sueño o de manejo del estrés también se pueden beneficiar de la atención de salud complementaria e integral. En la actualidad, los niños sufren de estrés en proporciones realmente alarmantes. De modo que pensamos que las intervenciones en las escuelas son de suma importancia.
La fatiga y el dolor son problemas que sufren muchas personas con cáncer y sobrevivientes de esa enfermedad. Las terapias complementarias e integrales pueden emplearse junto con los tratamientos del cáncer y pueden ayudar a la recuperación y al alivio de los efectos secundarios residuales.
¿Qué le gusta hacer para divertirse cuando no está trabajando?
Lo primero que hago es salir. No importa cuál sea el tiempo o la temperatura. Me gusta hacer lo que corresponde a cada estación. Por el lado materno, todos mis familiares son artistas o músicos. Creo que heredé algo de eso también. Me gusta pintar acuarelas y tocar el piano porque eso me parece relajante. Me gusta hacer muchas cosas, además de trabajar.