Brittney Hammond tenía ocho años cuando se le empezó a caer el cabello.
Su prima, mientras le trenzaba el pelo, fue la primera que notó las partes calvas, del tamaño de una moneda.
Consultó a un dermatólogo con su madre y así supo que tenía alopecia areata, una enfermedad de la piel que hace que el cabello se caiga repentinamente en áreas pequeñas llamadas placas.
Algunas personas tienen durante años ciclos de crecimiento y caída del cabello. La alopecia areata no es dolorosa pero puede afectar la autoimagen de una persona.
Para Brittney, que ahora tiene 20 años, las placas de calvicie no eran tan importantes cuando estaba en la escuela primaria. Pero en la secundaria, las cosas cambiaron.
"Siempre me preocupaba quién se iba a dar cuenta. Llegué a plancharme el pelo todos los días", explica Brittney.
De esta manera, Brittney podía cubrir las partes calvas en el cuello y ocultar el problema.
Las exigencias de la escuela secundaria
En escuela secundaria, el entrenador del equipo de porristas ("cheerleaders" en inglés) quería que todas se arreglaran el pelo con una cola de caballo.
A Brittney le preocupaba que otros notaran las partes calvas, así que las cubría con un spray negro para el cabello. También probó una extensión de pelo cosida a su cabello natural. Pero esto hizo que se le cayera más cabello.
Finalmente, le preguntó al entrenador si podía arreglarse el pelo de otra manera para cubrir las placas de calvicie.
Cuando una compañera que tenía el cabello corto preguntó si podía hacer lo mismo, el entrenador le contestó sarcásticamente preguntándole si ella también tenía alopecia.
"Ese tipo de actitudes no facilitaban las cosas", dijo Brittney.
Actualmente, Brittney está en tercer año de la Universidad Estatal de Georgia y está en el equipo de porristas.
Usa un champú especial para mantener el cabello natural saludable. También usa pelucas y maquillaje para dibujarse las cejas.
"Las pelucas se han convertido en una parte importante de mi vida", explicó Brittney. "Y si pierdes las cejas, como yo, el maquillaje es tu mejor amigo".
El apoyo familiar
La familia de Brittney la ha apoyado con su alopecia.
"Fueron los únicos que vieron el estado natural de mi cabello en su peor momento", dijo.
Su padre, que también tiene alopecia, le ha dado un apoyo especial. La alopecia es una enfermedad genética, esto significa que se hereda de un familiar, por ejemplo, uno de los padres.
Los altibajos
A pesar de contar con un fuerte sistema de apoyo, Brittney todavía siente la presión.
"En la comunidad afroamericana, el cabello es importante y se nos juzga por él", añadió.
Para ayudarse a sí misma y a otros, Brittney empezó un canal de YouTube en el que habla sobre la alopecia y cómo afrontarla.
Su mensaje principal tiene que ver con la autoestima y la determinación.
"La enfermedad no te define", dice Brittney. "Pero te pone a prueba. Para sobrellevarla, hay que aprender a ser fuerte, a quererse a uno mismo y a motivarse".
Y agrega que "lo único que importa es sentirse cómodo con uno mismo".