El presentador de CNN, John King, ha cubierto la política estadounidense por décadas. Millones de personas en los Estados Unidos se han sintonizado para escucharle sus actualizaciones de las encuestas a través de un mapa estadounidense de alta tecnología en las noches de elecciones. Recientemente, King compartió la noticia personal de que tiene esclerosis múltiple (EM), una enfermedad crónica que afecta el sistema nervioso central. King habló con la revista MedlinePlus de los NIH sobre su experiencia con la EM y por qué decidió contar 13 años después de su diagnóstico.
¿Cómo descubrió que tenía EM?
Ahora está claro que estuve experimentando síntomas de EM por una década antes de mi diagnóstico, especialmente en las piernas: entumecimiento, hormigueo, sensación de que mis piernas pesaban como el plomo o que no respondían. De vez en cuando se me caían cosas o tenía problemas con mi agarre. Sin embargo, siempre se lo achaqué a la falta de atención, la fatiga o la estupidez aleatoria. Además, los médicos pensaron desde el principio que estos problemas posiblemente estaban relacionados con la lesión que tengo en un par de discos en la parte baja de la espalda.
Mientras cubría una convención presidencial en el verano de 2008, tuve entumecimiento y pérdida de control que se extendió a las manos y la parte superior de mi cuerpo. Un paramédico en el lugar de la convención me hizo a un lado y me dijo: “apuesto a que tiene esclerosis múltiple”. Me tomó un tiempo hacerme todas las pruebas correspondientes, pero a fines de ese otoño finalmente me hice una serie de pruebas que confirmaron que tenía EM.
¿Qué pasaba por su cabeza cuando recibió el diagnóstico de EM?
Me llenó de miedo escuchar las palabras esclerosis múltiple, más aún cuando leí y me di cuenta de lo cruel que es esta enfermedad para muchas personas. Sin embargo, los médicos me tranquilizaron desde el principio. Debido a que sabíamos que algunos de mis síntomas venían desde una década antes del diagnóstico, estaban bastante optimistas de que tenía el tipo de EM "recurrente-remitente". Si bien no había garantías, la esperanza era que con medicamentos se podría controlar esta forma de EM.
¿Como está ahora?
La pregunta "¿cómo está?" siempre es divertida. Estoy muy bien y sé que soy afortunado, pero la EM me acompaña todos los días. No he tenido la sensación completa en mis piernas desde que Bill Clinton era presidente. Recientemente, mi lado derecho y especialmente mi mano derecha están teniendo problemas. Me caigo a veces. Algunos días tengo que planear cada paso que doy. Tengo que pensar y concentrarme en cosas que para la mayoría son de segunda naturaleza, como pararme o sostener la taza de café. ¿Necesito la baranda en las escaleras? ¿Tengo dolores de cabeza y qué tan graves son? Sin embargo, he aprendido a hacer snowboard aunque realmente no puedo sentir los pies. Solo una vez en 13 años desde mi diagnóstico he tenido que perder un día de trabajo debido a la EM.
¿Qué lo llevó a hablar?
Mantuve mi diagnóstico en secreto para la mayoría de las personas por 13 años y no tenía planes de hablar. Pero la creciente frustración con algunas de las conversaciones sobre el COVID-19 en el país me llenaron la copa. Los medicamentos que tomo para tratar la EM comprometen mi sistema inmunitario, por lo que corro un mayor riesgo de contraer COVID-19. Permití que los expertos médicos de CNN se ocuparan del debate “libertad” versus “ciencia” sobre el uso de mascarillas, pero obviamente este era un tema en el que estaba pensando mucho debido a mi EM. Un día, nuestra conversación en el aire incluyó una declaración particularmente escandalosa de una personalidad de los medios de comunicación sobre el uso de mascarillas, y hablé sobre mi diagnóstico de EM en ese momento. Expliqué que quería compartir esta información personal porque estaba agradecido con aquellos que se vacunan y usan la mascarilla. No solo se protegen a sí mismos; me están protegiendo a mí ya muchos otros a su alrededor.
¿Cuál es su mensaje para otras personas que están lidiando con EM?
Recuerden los regalos que obtenemos del desafío. Muchos días son frustrantes o peores. Sin embargo, el cerebro humano y el cuerpo son notables en la forma en que se adaptan a la lucha. La resiliencia y la tenacidad que se necesitan para luchar contra la EM son excelentes habilidades para otros desafíos.
¿Qué quiere que los demás sepan sobre la EM?
Una cosa que la EM nos enseña rápidamente es que hay tantas cosas que son invisibles para nosotros. Si tiene un amigo o familiar con EM, debe saber que hay cosas que usted no puede ver y cosas que estos seres queridos tal vez no quieran compartir todo el tiempo. Esto puede causar tensión en las relaciones, que es otra pieza gigante del desafío.
Para aquellos que no tienen ninguna experiencia directa con la EM, deben saber que algunas de las cosas que son fáciles para ustedes pueden ser realmente difíciles para la persona en el escritorio de al lado o para el extraño frente a usted en la fila que tal vez no se esté moviendo tan rápido como usted quisiera. Todos tenemos desafíos. Recuerden que algunos son invisibles.
¿Hay algo más que le gustaría compartir con los lectores de nuestra revista?
En primer lugar, me gustaría expresar mi enorme agradecimiento a los científicos y otros profesionales en la primera línea de la pandemia del COVID-19. Como periodista, me han ayudado a aprender. Como padre, han luchado para ayudar a los que más quiero.
También plantearía una especie de desafío. Los debates sobre las vacunas y los mandatos son a la manera estadounidense y debemos acogerlos y apreciarlos. Sin embargo, la explosión de información errónea, desinformación y conspiración son una amenaza para la salud pública y el apoyo público al trabajo crítico. De manera que debemos pensar en cómo nos comunicamos y cómo ponemos los pies en la tierra donde estas cosas se arraigan