La psoriasis es una enfermedad crónica (de larga duración) de la piel que causa descamación e inflamación y afecta a más del tres por ciento de la población de los Estados Unidos.
Aunque puede ocurrir a cualquier edad, afecta principalmente a los adultos. Afecta igualmente a hombres y mujeres.
La psoriasis se produce cuando las células de la piel se elevan rápidamente a la superficie y se acumulan allí antes de poder madurar. Este proceso (conocido como regeneración) lleva aproximadamente un mes, pero en las personas con psoriasis puede ocurrir en pocos días.
La psoriasis típicamente produce parches de piel gruesa y roja (inflamada) cubiertos por escamas plateadas. Estas manchas, a veces llamadas placas, suelen causar picazón o dolor. Las placas suelen aparecer en los codos, las rodillas, otras partes de las piernas, el cuero cabelludo, la parte baja de la espalda, la cara, las palmas de las manos y las plantas de los pies. Pero pueden ocurrir en la piel de cualquier parte del cuerpo.
¿Cómo afecta la psoriasis a la calidad de vida?
Las personas con psoriasis pueden sentir un malestar físico considerable y algo de discapacidad. La picazón y el dolor pueden interferir con funciones básicas, como cuidarse, caminar y dormir. Las placas en las manos y los pies pueden dificultar el trabajo en ciertas ocupaciones físicas, en algunos deportes y en el cuidado de familiares. Las personas con psoriasis moderada a grave también pueden sentirse acomplejadas por su aspecto.
¿Cómo se diagnostica la psoriasis?
Como la psoriasis puede parecerse a otras enfermedades de la piel, los médicos a veces tienen dificultad para diagnosticarla. Para confirmar el diagnóstico, puede ser necesario examinar una muestra pequeña de piel con un microscopio.
En muchos casos, hay antecedentes familiares de psoriasis. Los investigadores que han estudiado a muchas familias afectadas por la psoriasis identificaron genes relacionados con la enfermedad.
Las personas con psoriasis pueden notar momentos en que la piel empeora, llamados brotes. Las infecciones, el estrés y los cambios climáticos pueden provocarlos. Además, algunos medicamentos pueden desencadenar un brote o empeorar la enfermedad.
¿Cómo se trata la psoriasis?
Los médicos suelen tratar la psoriasis en pasos de acuerdo a la gravedad de la enfermedad, el tamaño y el lugar de las regiones afectadas y el tipo de psoriasis. Las opciones incluyen:
- Medicamentos que se aplican a la piel (tratamiento tópico)
- Tratamiento con luz (fototerapia).
- Medicamentos orales o inyectables (tratamiento sistémico)
Con el tiempo, la piel afectada puede volverse resistente al tratamiento, especialmente si se usan corticoesteroides tópicos. Además, un tratamiento eficaz para una persona puede hacer poco efecto en otra. Por esto, los médicos suelen utilizar un enfoque de prueba y error para encontrar la opción que da resultado
Tratamiento tópico
Los tratamientos aplicados directamente a la piel pueden mejorar la enfermedad. Los médicos han encontrado que algunos pacientes responden bien a los corticosteroides en pomada o crema, la vitamina D3, los retinoides, el alquitrán de hulla o la antralina . Las soluciones y los lubricantes de baño pueden ser calmantes pero rara vez son suficientemente fuertes como para mejorar la piel. Por esto, se suelen combinar con remedios más fuertes.
Fototerapia
La luz ultravioleta (UV) natural del sol y el suministro controlado de luz ultravioleta artificial se usan para tratar la psoriasis. Es importante que un médico administre la fototerapia. Pasar demasiado tiempo al sol o en una cama bronceadora puede dañar la piel, aumentar el riesgo de cáncer de piel y empeorar los síntomas.
Tratamiento sistémico
Para las formas más graves de psoriasis, los médicos a veces recetan medicamentos en pastilla o inyección.
- Ciclosporina. Tomada por boca, la ciclosporina actúa deprimiendo el sistema inmunitario para frenar la regeneración rápida de las células de la piel. Puede ofrecer un alivio rápido de los síntomas, pero una vez suspendido el tratamiento la enfermedad vuelve a aparecer. La ciclosporina puede alterar el funcionamiento de los riñones o causar presión arterial alta (hipertensión). Por eso es importante la supervisión médica.
- Metotrexato. Al igual que la ciclosporina, el metotrexato deprime el sistema inmunitario para frenar la regeneración de las células de la piel. Se puede tomar por boca o inyectado. Los pacientes que toman metotrexato deben estar en observación porque el medicamento puede causar daño en el hígado y disminuir la producción de glóbulos rojos (que transportan oxígeno), glóbulos blancos (que combaten las infecciones) y plaquetas (que aumentan la coagulación).
- Retinoides. Los retinoides orales son compuestos con propiedades similares a la vitamina A. Se pueden recetar para casos graves de psoriasis que no responden a otros tratamientos. Como estos medicamentos pueden causar defectos de nacimiento, las mujeres deben consultar con su médico si planean quedar embarazadas.
- Medicamentos biológicos. Los productos biológicos están hechos de proteínas producidas por células vivas en vez de sustancias químicas. Interfieren con los procesos específicos del sistema inmunitario que causan una producción excesiva de células de la piel e inflamación. Estos medicamentos se inyectan (a veces el mismo paciente hace esto). Es necesario que los médicos vigilen atentamente estos tratamientos.
- Inhibidores de la PDE4. Tomados oralmente, los inhibidores de la fosfodiesterasa 4 (PDE4) actúan sobre moléculas que están adentro de las células inmunitarias para suprimir la rápida regeneración de las células de la piel y la inflamación.
Terapia combinada
La combinación del tratamiento tópico, la fototerapia y los tratamientos sistémicos suele permitir dosis más bajas de cada uno y puede dar mejores resultados.
Hay muchas estrategias para el tratamiento de la psoriasis. Pregúntele a su médico cuál es el mejor para usted.