Las migrañas son más que un simple dolor de cabeza (enlace en inglés).
A veces causan vómitos, agotamiento, irritabilidad y un dolor intenso que puede interferir con las actividades de la vida diaria.
"Antes de una migraña, puede llegar una oleada de fatiga o de bostezos", explica Linda Porter, Ph.D., del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares. "Una vez que la gravedad del dolor disminuye y se pasa, se puede sentir fatiga, confusión mental o sensibilidad alta a la luz".
Además de un dolor de cabeza que suele ser de un solo lado, los síntomas incluyen cambios de estado de ánimo, antojos de comida, náuseas y aura. El aura crea luces brillantes y parpadeantes o "zigzags" en el campo visual. Estos síntomas adicionales y el aura suelen ocurrir antes del dolor de cabeza, y para las personas con migrañas pueden ser un presagio de que se avecina un dolor de cabeza.
¿A quiénes afectan la migrañas?
Las mujeres tienen tres veces más probabilidades de tener migrañas que los hombres. Los cambios hormonales, como los ciclos menstruales o el embarazo, pueden causar migrañas. La mayoría de las mujeres notan una mejora después de la menopausia. Los niños también pueden tener migrañas.
Causas
Los desencadenantes de las migrañas varían mucho de una persona a otra.
Algunos de ellos son el estrés, los cambios hormonales, los cambios en el ciclo del sueño, la deshidratación, los sonidos fuertes, los olores intensos, los cambios repentinos de ambiente, el uso de tabaco y la cafeína. Sin embargo, la abstinencia de cafeína también puede causar migrañas.
Además, algunos alimentos —como el alcohol, el chocolate, el queso y las levaduras— pueden causar migrañas, sobre todo si se combinan con otros desencadenantes.
Tratamiento
Además de reposo, algunos medicamentos recetados y otros de venta libre, como el ibuprofeno, la aspirina o el acetaminofeno, alivian el dolor y le permiten volver a funcionar. Hay medicamentos, que se suelen tomar todos los días, para prevenir las migrañas.