Las comunidades de minorías raciales y étnicas de Estados Unidos se ven afectadas de forma desproporcionada por el COVID-19. Esto significa que han sido más afectadas por la pandemia que otros grupos. Por este motivo, los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) lanzaron en septiembre de 2020 un programa de subvenciones para la difusión de información y el fomento de la confianza. En abril de 2021, este programa, la Alianza de Participación Comunitaria (CEAL, por sus siglas en inglés) contra las Disparidades del COVID-19 de los NIH, anunció subvenciones adicionales por 29 millones de dólares. Actualmente, CEAL financia programas en 22 estados y el Distrito de Columbia, y tiene previsto llegar a más lugares del país este verano.
Los equipos del CEAL se centran en las personas de las comunidades afroamericana, hispana o latina, indígena americana o nativa de Alaska, y nativa de Hawai y las islas del Pacífico. En Estados Unidos, estas poblaciones representan más de la mitad de los casos de COVID-19.
La meta del programa es combatir "la desinformación a la que todos estamos expuestos, y la desconfianza en la investigación sobre COVID-19", dijo la Dra. Monica Webb Hooper, subdirectora del Instituto Nacional de Salud de las Minorías y Disparidades en la Salud (NIMHD, por sus siglas en inglés), que dirige el programa junto con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI, por sus siglas en inglés).
"Queremos crear información de manera conjunta para educar al público acerca de los estudios clínicos y fomentar la confianza en la ciencia", dijo la Dra. Webb Hooper. Muchas personas suponen que "los grupos de minorías raciales no están interesados en participar en la investigación. Eso no es cierto. Pero nos tenemos que ganar su confianza". Para lograrlo, los equipos de CEAL se asociarán con una variedad de líderes locales, "personas que viven, trabajan y rinden culto en las mismas comunidades en donde la pandemia ha causado los índices más altos de enfermedad y muerte", dijo la Dra. Gary Gibbons, directora del NHLBI. El esfuerzo también tiene un significado personal para la Dra. Webb Hooper.
"Tengo tres padres que están en estudios clínicos de vacunas", dijo. "Son afroamericanos y adultos mayores. Saben lo que ocurrió en el pasado en esos estudios espantosos, como el de Tuskegee. Pero les pareció que era importante contribuir a la misión de la ciencia y a la salud pública participando y estando presentes, siendo parte de la solución".