Las investigaciones sobre el VIH han avanzado mucho desde que comenzó la epidemia en los años de 1980. Hoy en día, las personas con el VIH pueden vivir una vida larga y saludable con el tratamiento adecuado.
El tratamiento para las personas con el VIH se conoce como (TAR), una combinación de medicamentos que se toman juntos. Los pacientes deben recibir TAR por el resto de su vida. Esto puede resultar difícil para las personas que tienen barreras financieras y de otro índole para acceder a la atención médica. Estudios recientes respaldados por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas y el Instituto Nacional de Salud Mental están ayudando a ampliar el acceso de las personas al TAR.
¿Qué es el VIH?
VIH significa “virus de la inmunodeficiencia humana”. El VIH daña el sistema inmunitario porque destruye un tipo de glóbulo blanco que ayuda al cuerpo a combatir las infecciones. Como resultado, el VIH puede poner a una persona en riesgo de contraer otras infecciones y enfermedades.
El VIH es el virus que causa el SIDA, que significa “Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida”. El SIDA es una etapa avanzada de una enfermedad relacionada con el VIH en la que el sistema inmunitario ya no puede proteger el cuerpo. No todas las personas con el VIH desarrollan el SIDA. El SIDA también es menos común hoy en día gracias a los avances en el tratamiento contra el VIH.
¿Cómo se propaga el VIH?
El VIH se propaga al tener relaciones sexuales vaginales, anales o, en algunos casos, orales sin barrera (como condones o protectores dentales) con alguien que tiene el virus. El VIH también se puede propagar al compartir agujas con alguien que tiene el virus.
Hay otras formas de transmitir el VIH, pero gracias a los avances en la atención médica, se están volviendo mucho menos comunes. Las personas con el VIH que están embarazadas pueden transmitir el virus a su hijo a través de la placenta, la sangre y otros fluidos corporales o la leche humana. Es posible contraer el VIH al compartir agujas con una persona que tiene el virus. En los Estados Unidos, las donaciones de sangre se han sometido a pruebas de detección del VIH desde 1985 y el riesgo de contraer el VIH a través de las donaciones de sangre es extremadamente bajo.
Cualquier persona puede tener el VIH, pero los grupos más afectados incluyen hombres gay y bisexuales y personas negras y latinas.
¿Qué es el TAR?
Si bien no existe cura para el VIH, los investigadores de los NIH están trabajando en una vacuna contra el VIH para prevenir la infección. Mientras tanto, el VIH se puede controlar con TAR. Este puede reducir la cantidad del virus en el cuerpo. El TAR le da al sistema inmunitario la oportunidad de recuperarse y combatir infecciones o cánceres relacionados con el VIH. También reduce el riesgo de transmitir el virus a otras personas.
El TAR funciona mejor cuando se toma exactamente según lo recetado. Omitir una dosis puede hacer que el virus resista los medicamentos y dañe el sistema inmunitario.
Necesidad de TAR con menos frecuencia
La mayoría de los TAR se toman diariamente. Tomar TAR todos los días puede ser difícil para las personas que no tienen vivienda o alimentación confiables, que tienen enfermedades mentales o trastornos por uso de sustancias, o que están involucradas en el sistema legal. Es posible que estos grupos no tengan acceso o no puedan pagar este tratamiento. Es posible que tampoco tengan transporte para llegar al consultorio de un proveedor de atención de salud.
Los medicamentos de acción prolongada podrían ayudar a las personas a superar algunas de estas barreras. Investigadores en San Francisco estudiaron a 133 personas con el VIH que recibieron inyecciones de TAR de acción prolongada. Los participantes del estudio recibieron inyecciones cada cuatro a ocho semanas entre junio de 2021 y noviembre de 2022. El personal de la farmacia también les recordó que debían tomar sus medicamentos y los investigadores controlaron frecuentemente su salud.
Todos los que comenzaron el estudio con supresión del VIH (lo que significa que el TAR mantuvo la cantidad del VIH en la sangre tan baja que no podía detectarse con las pruebas típicas del VIH) permanecieron así, y para la mayoría de las personas cuyo VIH no estaba disminuido cuando se inscribieron, al final del período de estudio el virus estaba disminuido.
Entrega del TAR a domicilio para pacientes en zonas rurales
Obtener acceso a una clínica para recibir tratamiento antirretroviral puede resultar difícil para las personas que viven en zonas rurales. Incluso si una persona encuentra atención, es posible que le lleve mucho tiempo ver a un proveedor. Esto es común en algunas partes de Sudáfrica, un país donde aproximadamente 1 de cada 5 adultos tiene el VIH.
En un estudio de 155 personas de KwaZulu-Natal, Sudáfrica, aquellos que recibieron TAR en su casa durante un año experimentaron una mayor disminución del VIH que aquellos que acudieron a la clínica. Los participantes pagaron una tarifa única, que se basó en sus ingresos, por el servicio de entrega. La tarifa ascendía a entre $2 y $6 dólares (lo que equivale a entre 38 y 114 rands sudafricanos).
Todos los que utilizaron el servicio expresaron que les ayudó a recordar tomar el TAR todos los días y que volverían a utilizar el servicio.